Omitir vínculos de navegaciónInicio.Blog.Entrada imprimir páginaimprimir
BLOG
Blog
PARTICIPACIÓN SOCIAL PARA EL DESARROLLO DE MÉXICO/JOSÉ CARLOS ORTEGA SANDOVAL

Aguascalientes
Miércoles, 29 de abril de 2015

Blog

Por el Ing. José Carlos Ortega Sandoval

Las campañas electorales ya iniciaron, las cuales representan una oportunidad más de participación ciudadana y mejorar la relación entre el sistema político y la sociedad; sin embargo, el escenario es más complicado no solo por la estrategia en la guerra sucia que los partidos de oposición han generado la cual, debilita el ejercicio democrático para contar con un debate amplio de propuestas y la cercanía con la sociedad civil.

            Para generar un verdadero cambio en nuestro país, se requiere no solo de una reforma en el ejercicio del poder, lo que involucra no solamente al sistema político y de gobierno sino, a los factores de desarrollo económico para combatir la desigualdad social. La relación entre los diferentes sectores sociales debe fortalecerse y en este sentido, el sistema de partidos no tendría relación directa sino, promover los valores morales y la formación de una ciudadanía con sentido social. La cultura de México debe renovarse en este aspecto, la educación debe incentivar la responsabilidad social y no solamente limitarse en el espíritu de competencia profesional. El sentido de liderazgo es lo que nos hace conscientes sobre la necesidad de la transformación de México.

Las instituciones, no solo los partidos políticos ni el gobierno, sino las universidades y sector empresarial así como organismos de la sociedad civil, tienen como reto la difusión de los diferentes temas sociales con el objetivo de encontrar soluciones a los problemas desde el analfabetismo, pobreza, apoyo a los discapacitados, desempleo hasta la exigencia de mejores mecanismos de comunicación a los medios de información. El problema de México creo tiene su base más en el aspecto social el cual nos relaciona a todos ricos, pobres, de izquierda, de derecha, así como a los diferentes partidos ¿Por qué no iniciar la transformación de este país regenerando el pacto social en lugar de la descalificación política?

Si bien es cierto que la representatividad social según la Constitución Política está en los partidos y gobierno el cual debe generar las políticas públicas acordes al desarrollo social contra la desigualdad y los intereses, la relación que tenemos como sociedad debe renovarse. El tema de los jóvenes sobre su inclusión en los espacios de participación política  es un reto para los partidos pero no debe convertirse solo en una estrategia de campaña así como el gobierno debe apoyar su desarrollo disminuyendo las tasas de desempleo. La educación se convierte en una piedra angular pero debe ir a la par en las oportunidades porque el conocimiento pierde su valor sino se fortalece con la participación. La congruencia en este sentido no solo debería exigirse al sistema  sino como sociedad, vigilar y generar estos aspectos de crecimiento y que como jóvenes y ciudadanos, seamos responsables informándonos y siendo agentes proactivos de cambio para nosotros y nuestra sociedad.

Las estadísticas del INEGI indican que en 2010, de acuerdo con los resultados del Censo de Población y Vivienda, la edad mediana de la población nacional se ubicó en 26 años; lo que nos ubica como un país con un enorme potencial productivo, dado que la mayoría de la población se encuentra en edad de trabajar. De acuerdo con datos del INEA, en México hay casi 32 millones de personas mayores de 15 años que no han concluido la educación secundaria. Con base en estos datos, la OCDE estima que únicamente 36% de quienes tienen entre 15 y 64 años de edad cuenta con estudios completos de secundaria. Este indicador es altamente contrastante con el promedio de los países que integran a la OCDE, en donde se ubica en un 75% en ese segmento de edades. La falta de estudios disminuye las oportunidades de desarrollo social lo cual se traduce en mayor pobreza la cual, en no sólo ha generado un crecimiento más lento, sino que también ha sido la causa de inestabilidad económica y política. Por eso, es necesario evitar que se expanda, ya que pueden generar más descontento social.

En temas de política social, el presidente Enrique Peña Nieto planteó tres acciones de gobierno durante su toma posesión en el Palacio Nacional. La primera es la Cruzada Nacional contra el Hambre; la segunda, un Seguro de Vida para Jefas de Familia y, la tercera, la ampliación del programa 70 y Más, mismos que refrendó en el Pacto por México. El sexenio de Felipe Calderón terminó con altas cifras de deficiencia alimentaria, Para entonces, los grupos más vulnerables con escasez alimenticia sumaban casi 52 millones de personas en pobreza, de las cuales 11.7 millones vivían en pobreza extrema y 40.3 en pobreza moderada, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval-2012). El actual gobierno federal ha promovido un programa de financiamiento a jóvenes emprendedores con la finalidad de apoyar el crecimiento económico de este sector y disminuir la dependencia hacia las condiciones del empleo. Una muestra de iniciativa  está en la participación política así como en el desarrollo empresarial y representa un reto para nosotros superando la apatía.

El descontento hacia las instituciones se entiende por la problemática que vivimos todos los mexicanos; sin embargo, esto se está traduciendo en mayor abstencionismo cuando la participación es fundamental no solo en el tema político sino para el desarrollo social. En este punto la cultura debe transformarse para que como sociedad seamos agentes de cambio en las estructuras del país. La democracia exige la participación social y no solamente la libertad de expresión en las manifestaciones, exige el involucramiento de la ciudadanía en los espacios institucionales como los partidos, exige la reconciliación de los diferentes sectores sociales, exige mejorar la relación entre el sistema político y la sociedad civil, exige también anteponer el sentido de patriotismo a los intereses y, finalmente, exige el compromiso de cada uno de nosotros como ciudadanos.

            El nivel de desarrollo de una sociedad se mide a partir de la participación social de sus diferentes miembros así como si interrelación desde el educativo, empresarial, organismos de la sociedad civil hasta el desarrollo de la política en partidos y gobierno. Es así como la democracia se logra a través de una verdadera participación de sus individuos y depende del grado de madurez de sus ciudadanos y es como la educación se puede convertir en un elemento de transformación política económica y social. 

Por esto, "La participación ciudadana es el componente más importante para el desempeño de la política social, ya que sin ella, la política social se limita al asistencialismo, Más que un cambio de conceptos, detalló, se trata de un cambio de actitudes individuales y de las instituciones públicas, toda vez que el derechohabiente social participa para hacer realidad los derechos sociales y humanos, y las instituciones reconocen su obligación de responder a las demandas y trabajar conjuntamente con los individuos y sus comunidades. Es formar ciudadanía, es decir, sujetos activos de derechos", aseguró Javier García Guerrero, subsecretario de (Sedesol).

El promover que los valores sociales y culturales para que se integren de manera objetiva, es para lograr el Desarrollo Sustentable de la humanidad, fomentando la participación de los núcleos sociales, la preservación y conservación de los recursos naturales, llevando a cada nación a un crecimiento económico consolidado. Es así como la democracia se entiende no solo en la representatividad de los partidos y gobiernos sino en el impacto de la participación de cada uno de sus ciudadanos generando el desarrollo al cual por derecho debemos estar involucrados. Esta es una perspectiva que quiero compartir para lograr el México que todos quisiéramos.



Visitas: 2649


LO MÁS LEÍDO
TWITTER